Caligrafía para Bodas

noviembre 3, 2014
Contratar los servicios de un calígrafo para que las invitaciones de la boda queden bonitas también por fuera es algo relativamente habitual, y podemos considerarlo como una tradición en el mundo de las bodas; más allá de las modas que van y vienen en este mundillo, enviar las invitaciones con el nombre del destinatario escrito con una letra preciosa y a mano siempre ha sido, y será, un acierto.


Si vuestras invitaciones no son clásicas y os parece que no va a quedar bien utilizar una letra demasiado sobria para escribir los sobres, pero os apetece que el resultado final esté muy cuidado, deberéis buscar un calígrafo que os ofrezca distintos tipos de letra, y elegir una que tenga una buena ejecución pero no quede excesivamente cursiva. En el collage que os muestro a continuación podéis ver distintos ejemplos, y cómo varios de ellos son aptos para invitaciones actuales y con un diseño moderno.



Jugar con el color de la tinta también hará que el efecto sea distinto y poco clásico; si los sobres son blancos podéis elegir una tinta negra o gris; o bien del color del papel en el que hayáis impreso las invitaciones que van dentro. Si los sobres son de color queda muy bonito utilizar una tinta blanca para dar contraste.


Más allá de la caligrafía de invitaciones de boda, optar por cuidar otros elementos gráficos de la boda con el trabajo de un escribano profesional es una gran idea. Si vais a colocar marca-sitios en las mesas de la boda queda muy elegante que vayan escritos con caligrafía; e independientemente de que el estilo general de vuestra boda no sea muy tradicional, jugando con la textura del papel y el color de la tinta conseguiréis que quede coordinado con la decoración global de las mesas.




Y si vamos un poco más allá, ¿no os parece ideal que las minutas con el menú de la boda estén caligrafiadas? A mi me encanta el efecto que hace, aunque lógicamente es una opción más adecuada para enlaces con pocos comensales que para una boda de 300 asistentes (por una cuestión presupuestaria básicamente, ya que escribir a mano cada menú es un trabajo artesanal que no puede competir en precio con la impresión digital por ejemplo).



La caligrafía en realidad se puede aplicar casi en cualquier soporte; queda fenomenal en señales de madera, en cartelería de gran formato para poner el menú de la boda, o para personalizar los regalitos de los invitados con el nombre de cada asistente.