Irene y Víctor, los protagonistas de este post, son una pareja de arquitectos que contactó con Something Blue más de un año antes de su boda. Sabían que querían casarse en Madrid ciudad y que como no querían “una boda al uso”, así iban a necesitar ayuda con los preparativos y por ese motivo contrataron nuestro servicio de organización de bodas. Querían celebrar su boda en noviembre, en el centro y dar a su enlace un ambiente algo más desenfadado de lo habitual.
Se casaron hace hoy justo 1 año, así que aprovechando la fecha os voy a contar la historia de esta #BodaSomethingBlue.
La ceremonia civil se celebró en la Casa de la Panadería, en la Plaza Mayor de Madrid. Ayudamos a los novios con los trámites necesarios para la reserva de fecha en el Ayuntamiento y con el papeleo que esto conlleva. Tengo que reconocer que me encantan estas bodas en las que todo empieza en pleno centro de la ciudad. El novio se desplazó hasta allí, ¡en Metro! Y la verdad es que además de añadir naturalidad y tranquilidad al desarrollo del día, hacer este tipo de cosas hace que el reportaje de la boda tenga fotos tan chulas como estas.
Irene y Víctor son unos grandes amantes de la ciudad de Madrid y quisieron sorprender a sus invitados invitándoles a tomar un chocolate con churros en San Ginés después de la ceremonia. Así que al salir de la ceremonia repartimos confeti y unos tickets a canjear en la famosa chocolatería madrileña, a donde nos dirigimos después todos juntos a hacer una de las cosas más castizas que puede haber. Allí llevamos además un equipo de megafonía con el que un catedrático de arquitectura muy amigo de los novios dio un discurso sobre esta ciudad tan especial para ellos.
Con el espacio de celebración dimos muchas vueltas ya que había varias opciones que encajaban con la idea de boda que tenían los novios y finalmente La Real Fábrica de Tapices fue el lugar elegido para este enlace. Después les ayudamos a elegir el catering, y La Cococha se adaptó muy bien a la idea que tenían los novios: un cóctel largo, y luego un buffet, de manera que el resultado final fue una boda algo más informal de lo habitual, que es lo que querían Irene y Víctor.
Una vez en la Real Fábrica de Tapices, con un sol espléndido y una temperatura totalmente primaveral aunque estábamos a mediados de noviembre, los invitados disfrutaron de un cóctel estupendo con música en directo (actuó Ladies & Monkeys, un grupo formado por amigos de los novios).
La decoración de esta boda fue muy otoñal, con brezo y musgo en los centros de mesa. En la zona del cóctel montamos un corner de Mahou (en lata verde, como le gusta al novio), y el seating plan en unos fraileros que recogimos de una obra de rehabilitación de un edificio antiguo que estaba llevando la novia; así que más personalizado imposible. En general fue una boda con muuuuuuy buen ambiente, con unos novios relajados y felices y unos invitados que disfrutaron muchísimo de este día tan bonito.
- Organización integral y decoración de la boda: Something Blue, Wedding Planner Madrid
- Fotografía: Luana Fischer
- Vestido de la novia: Rosa Clará
- Peluquería y Maquillaje novia: Elena Higuera