Empezamos la semana de la mejor manera posible, después de un puente del Pilar con dos Bodas Something Blue que han salido genial.
La primera de ellas se celebró el viernes en el Restaurante Miravalle, en Guadarrama. Los novios, Paula & Mario, nos contrataron para encargarnos de la decoración y coordinación el día de la boda; y es que aunque la novia había preparado con todo detalle su enlace necesitaba a alguien que realizara el montaje el día de la boda y supervisara la celebración asegurándose de que todo salía según lo planeado.
Según fueron llegando los invitados se les repartió un tarjetón dándoles la bienvenida de parte de los novios. Cuando la ceremonia civil estaba acabando se repartieron pétalos a todos los presentes, y también unos pomperos muy graciosos con forma de botellas de cava que causaron sensación.

La decoración floral de la ceremonia la realizó El Taller de Dimomo. El montaje tenía como protagonistas las rosas rojas (la flor preferida de la novia), combinadas con rafia y ramas de boj. Quedó súper bonito y muy apropiado para el tipo de espacio que los novios habían elegido para darse el sí quiero.

Desde nuestro punto de visto lo bonito de las ceremonias civiles es que son totalmente personales, en esta ocasión los novios quisieron realizar un ritual que se llama “Ceremonia de la Vela” que tiene un simbolismo precioso.

La zona del cocktail estaba al lado de la de la ceremonia, y en ella colocamos un “Rincón de los Deseos”, que posteriormente desplazamos a la barra libre para que los invitados que aún no hubieran dejado su dedicatoria a los recién casados tuvieran su oportunidad de hacerlo.
La decoración de la zona se completó con velitas que iban metidas en bolsas, como la ceremonia se celebró a última hora de la tarde en cuanto comenzó el cocktail empezó a anochecer y la ambientación con velas se lució muchísimo.

El protocolo de mesas estaba formado por personajes de series de dibujos infantiles, ya que la novia es profesora y quiso hacer un guiño a su profesión durante la cena de su boda.

Hubo un montón de regalitos para los invitados, y en los baños colocamos unas cestas con productos de primera necesidad que fueron muy útiles a lo largo de la celebración.
En la barra libre no podía faltar una candybar, que tuvo un toque especial con las velitas de té que se colocaron por toda la mesa (¡cometimos el fallo de hacer las fotos antes de encenderlas!).

No nos queda más que agradecer a Paula & Mario que hayan confiado en Something Blue, Wedding Planner Madrid para ayudarles con la organización de su boda, y desearles toda la felicidad del mundo en su matrimonio. Si vosotros estáis planeando vuestra boda y como estos novios queréis estar tranquilos de que el gran día salga todo bien y la decoración quede tal y como vosotros habéis planeado solo tenéis que contactar con nosotros y nos encargaremos de que vuestro enlace sea perfecto.